Hace 22 años, el 3 de mayo de 2001, Carlos Arturo Echeverri decidió iniciar una aventura nueva dentro de su inquieto espíritu emprendedor: el de comercializar y trabajar con pieles y cuero. Fruto de esa ardua e incansable labor nació Mundipieles, a la cual sigue liderando en compañía de su hijo, Carlos Esteban, quien le inyectó a la empresa frescura, energía, nuevas ideas e innovación.
Fruto de la evolución de la compañía surgió Mundilab, una planta de acabados en cuero, en el municipio de Copacabana, donde también desarrollan una importante labor social y ahora tienen en el horizonte muchas ideas y proyectos por desarrollar.
Dialogamos con don Carlos Arturo y Carlos Esteban, quienes contaron detalles acerca de la labor que ejercen, así como desmintieron ciertos mitos existentes alrededor del cuero, y recalcaron la importancia de estar afiliados a Fenalco Antioquia.
¿Cuáles son los productos que ofrece Mundipieles?
“Tenemos una gran variedad de productos, nos especializamos y nuestro ADN habla del cuero, vendemos cuero de origen animal, proveniente del ganado vacuno en su gran mayoría, manejamos diferentes tipos de cuero, para la industria del calzado, de la marroquinería, donde podemos mencionar bolsos, correas, billeteras, accesorios, complementos, manillas, aretes, manejamos también cuero para tapicería mueble y para tapicería automotriz”.
¿Cuáles son las ventajas del cuero?
“Es un material muy noble. En cuanto al tipo de clientes que tenemos, nos hemos encontrado con personas que diseñan interiores, paredes, pisos, el cuero es un material que se deja moldear, se deja trabajar y mezclar con otros materiales, entonces, en cuanto al uso, es un producto muy rico y ganador”.
¿Manejan más productos, adicional a los ya mencionados?
“Así es. También tenemos productos para el mantenimiento preventivo y sostenimiento del cuero porque muchas personas no saben cómo cuidarlo, cómo hacerle el mantenimiento a una tapicería automotriz, al mueble de la casa o al bolso, entonces manejamos esos productos que limpian e hidratan. Tenemos pieles tanto para todo tipo de clientes, desde un paquete de seis hojas en adelante, pero también manejamos una línea para los emprendedores, para los artesanos, vendemos desde 1.000 pesos en adelante, no hay mínimos ni máximos, realmente nos adecuamos a la necesidad que tenga el cliente”.
¿Qué ventaja puede tener un cliente que compra en Mundipieles?
“Creemos que lo más importante es educar al cliente, les explicamos por qué es mejor y un poquito más caro los productos en cuero que los sintéticos. El cuero tiene multitudes de cualidades, transpira, absorbe la humedad de la piel, es recuperable, duradero, incluso 20 veces más que el sintético, todo eso forma parte de un proceso que queremos enseñar. También les recalcamos que del cuero salen multitudes de productos, tinturas, grasas para labiales, cosmetología, la pasta de la proteína para los animales y otros más”.
¿Qué tan falso o qué tan cierto son los mitos que existen alrededor del cuero?
“El cuero ha sido una industria muy mitificada, hay muchos mitos en cuanto a la contaminación, malos olores, precio, el sacrificio del animal… pero en realidad somos de una industria descontaminante porque lo que hacemos es tomar un subproducto de la industria cárnica porque realmente al animal se le sacrifica por un tema de necesidad de alimentación del ser humano, el consumo de carne siempre va a existir, entonces tomamos ese excedente, ese sobrante de la industria cárnica, lo procesamos y lo volvemos útil para suplir otro tipo de necesidades, de vestuario y algunos otros, transformamos ese excedente en un producto útil, ahí entraríamos a hablar de economía circular”.
¿Y cuál otra bondad presenta el cuero?
“La durabilidad extendida. El cuero, o un producto en cuero puede durar cinco, diez o veinte años con su debido manejo o cuidado, mientras que un producto sintético o de otros materiales puede que te dure seis meses o un año.
Con el cuero no hay que temer, hay productos a base de agua que son naturales, a un artículo de cuero, que usted puede echarle tierra y se vuelve abono, ya son cueros procesados a base de productos de agua, biodegradables. La industria cada vez más se va transformando y va evolucionando para también mitigar esos efectos contaminantes porque toda industria o cualquier actividad comercial de fabricación, o hasta el mismo desplazamiento de nosotros genera un efecto ambiental, entonces lo que hace la industria es, por medio de nuevas tecnologías, tener productos cada vez más amigables con el medio ambiente, que reduzcan ese impacto”.
¿Qué los hace únicos o diferentes?
“Algo que mencionábamos anteriormente… tanto en nuestro punto de venta principal y en nuestros puntos de venta, porque también ya tenemos uno en Barranquilla desde hace dos años, es que nos enfocamos mucho en la pedagogía, en explicarle a cada cliente el uso del cuero según el calibre o el acabado, porque muchas personas vienen al mostrador queriendo un cuero, y más que eso buscan sin conocer bien su uso, para qué se puede utilizar, en qué momento usarlo, qué tipo de cuero va para una prenda de vestir, qué tipo de cuero para el calzado, cuál para la correa, para el forro del zapato… básicamente lo que manejamos en Mundipieles es una asesoría donde al cliente, más que hablarle de precios de artículos, es explicarle las bondades del cuero y de qué manera pueden usarlo”.
¿Cómo ha sido el crecimiento y la evolución de Mundipieles?
“Estamos en este punto de venta de Palacé, en el Centro de Medellín, desde hace 22 años, más exactamente desde el 3 de mayo de 2001. Esta es una empresa familiar, que tiene un legado muy lindo. Hemos estado en un proceso de recambio generacional, con nuevas ideas que sigan ayudando para que la empresa crezca y perdure”.
¿Qué significó la pandemia para la empresa?
“Para muchas empresas fue caótico, para nosotros fue un punto de inflexión importante porque crecimos y producto de ello nació Mundilab, nuestra planta de acabados en cuero, ubicada en el municipio de Copacabana. Allí nos dedicamos al desarrollo y personalización del cuero, si el cliente dice que necesita un cuero con tales características y colores, nosotros lo desarrollamos allá, Mundilab nos catapulta y nos lleva a dar un servicio más profesional y personalizado, donde la co-creación con el cliente ya es el valor principal, uno de los objetivos y la propuesta de valor más importantes. Ahí generamos Experiencia Mundilab, que consiste en invitación para universidades, proveedores, aprendices del Sena, estudiantes de la Universidad de Medellín y la UPB para que conozcan el proceso del cuero, lo vivan, interactúen con el material, entonces los estudiantes van pintan su propio cuero, lo graban salen con su trozo de cuero elaborado por ellos mismos, para luego ir a una clase en su institución educativa o de manera empírica, realizar una billetera, bolso o correa hecha por ellos mismos desde cero. Esta experiencia ha sido maravillosa”.
Debe ser muy satisfactorio todo lo que mencionan…
“Muchísimo. Hemos tenido estudiantes del Sena que les damos retales, o productos sobrantes, lo que las empresas pagan para botar, nosotros lo recuperamos y se los regalamos a los estudiantes, a fundaciones, y percibimos cómo ellos empiezan a hacer sus cositas, monederos, los vuelven una obra de arte, incluso hay algunos que exportan sus propios productos, nos apasiona que la gente prospere. Le apostamos al tema de la economía circular, del aprovechamiento del material, la idea de Mundipieles es no botar nada, todo se aprovecha, se clasifica y se empieza a destinar”.
¿Y qué tan importante resulta para la empresa ese componente social?
“Es trascendental para nosotros. Trabajamos también con la comunidad estudiantil, con el Centro del Diseño y Manufactura del Cuero del Sena, con un grupo de mujeres con cáncer de la Clínica Vida, mujeres que están en tratamientos de cuidados paliativos, también en Copacabana, en convenio con la Junta de Acción Comunal del barrio San Juan, tenemos dos grupos de aprendices que están capacitándose y estudiando para desarrollar marroquinería, 50 mujeres adultas y madres cabeza de familia, las apoyamos con el material, hacemos todo el tema de vinculación con el Sena para que se cree la oferta al grupo, también trabajamos con la Fundación Nedisco, de niños con capacidades especiales en el municipio, los llevamos para que hagan la Experiencia Mundilab, para que interactúen con el material, sembrarles la semillita del emprendimiento y desde ahí pueden elaborar sus propios desarrollos y hasta venderlos.
Es un trabajo que si bien dinamiza la economía y aporta al tema económico de la empresa también es un dinamizador social, buscamos siempre que las dos cosas vayan de la mano, dejar un granito de arena con la comunidad y la sociedad”.
¿Qué representa para la empresa estar afiliados a Fenalco Antioquia y desde hace cuánto lo están?
“Llevamos alrededor de 15 años afiliados y de manera muy activa desde hace ocho. Inicialmente solo utilizábamos a Procrédito pero sabíamos del potencial del Gremio, la cantidad de empresarios que reúne, empezamos a vincularnos más en cuanto a asistir a capacitaciones, formar parte de Fenicia con los cursos y propuesta formativa. Fenalco tiene muchísimo para entregarle a los empresarios, nos representa ante diferentes instituciones gubernamentales, nos apoyan en el tema jurídico, contable, de ventas, ha sido un apoyo muy importante, y es una agremiación que siempre está buscando mejorar, con espacios maravillosos para aprovechar y sacarle el jugo.
¿Qué expectativas guardan a futuro?
“Como empresarios siempre soñamos con seguir generando empleo, enseñar, impactar desde nuestros mismos colaboradores y sus familias, su entorno cercano. Ya tenemos a Mundipieles desde hace 22 años y en un mediano/largo plazo nos encantaría que se hable del Grupo Empresarial Mundi, con el actual punto de venta en Medellín, con Mundilab, en Copacabana, con el punto de venta en Barranquilla, seguir creciendo, incrementando nuestra capacidad instalada y poder brindar al cliente más soluciones. Finalmente, como somos empresa de servicios, lo que hacemos es tomar las necesidades del cliente, las adaptamos, transformamos y al final entregamos un material que resuelve esa necesidad o inquietud.
En algún momento exportamos, a Perú, pero nuestro sueño es consolidar clientes a nivel internacional, volver a exportar de manera mas frecuente, solucionando necesidades del cliente del exterior, si bien no queremos descuidar al cliente nacional, sabemos que las oportunidades que hay en el exterior son muy amplias, es el sueño.
Para terminar, ¿quisieran hacer alguna reflexión acerca del rol del empresario?
“Es un mundo apasionante pero a la vez exigente. Hay carreras que se tienen que ir sorteando, tema tan cambiante de las divisas, para algunos puede ser problema, para otros beneficio, y las empresas, así como el cuero, deben adaptarse a los entornos, al actual, al futuro, para eso siempre se debe sacar el espacio para pensar. El empresario muchas veces está inmerso en la inmediatez, lo urgente, pero se deben destinar espacios para visionar, pensar en qué se puede venir, y tratar de hacer jugadas que se anticipen a esos escenarios. No solo se trata de resolver en el momento sino de proyectarse”.
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