En 1997, Hernando Echeverri y Nelson Roldán decidieron lanzarse como empresarios de su propia marca y dieron vida a Macrollantas, en aquel entonces entendiendo la necesidad de consolidar un punto para la venta de llantas de la marca Pirelli. Desde entonces, la empresa ha tenido un crecimiento vertiginoso y hoy se posiciona como referente del mercado. A la venta de llantas de las más prestigiosas marcas de llantas, se le sumó la prestación del servicio integral automotriz, en las diversas sedes que tienen en el Valle de Aburrá y Oriente del departamento. Dialogamos con Hernando Echeverri, uno de los fundadores, Gerente, líder y alma y nervio de la organización. 
Hernando, ¿cómo fueron los orígenes de Macrollantas?
“Tuvieron que ver con la apertura económica, cuando se abrieron las fronteras en Colombia. En aquel momento solamente había, quizás, tres o cuatro marcas de llantas, las pocas que existían en el país no estaban atendiendo el mercado en cuanto a la oferta que necesitábamos, en su momento eran costosas. Pero se abrieron las fronteras, en Venezuela estaban cuatro fábricas automotrices muy poderosas: Pirelli, Firestone, Goodyear y General Motors, ya de eso hoy no queda nada. Toda esta situación facilitó que entráramos nuevos actores al mercado, Macrollantas nació en 1997 y el nombre lo adoptamos porque nuestra primera sede quedaba al frente de Makro, en San Juan. Nosotros abrimos cuatro meses después de Makro”.¿Y usted ya venía trabajando en sector automotriz antes del nacimiento de Macrollantas?
“Sí, yo ya estaba en el sector automotriz, trabajaba en Llanta Andina, una empresa que distribuía la marca Pirelli en Colombia, en ese entonces viajaba constantemente, especialmente en la zona del Eje Cafetero, en el Valle y Bogotá, y yo quería estar más mis hijos, compartir con ellos. Ahí decidimos fundar Macrollantas, fuimos los fundadores de Pirelli en Colombia, y a la fecha creo que somos los únicos que quedamos en el país”.¿Cómo ha sido el crecimiento de la empresa a través de estos 25 años?
“Hemos tenido una evolución muy bonita, hoy tenemos ocho plantas de servicio, como les denominamos. Contamos con 140 empleados directos, más algunos aprendices, otros indirectos, vamos acercándonos a la cifra de 300 vehículos diarios”.¿Qué servicios ofrecían en los comienzos y cuáles les han agregado con el paso de los años?
“Inicialmente éramos una empresa relativamente pequeña, con cuatro empleados, cuatro puestos de trabajo, ubicados en un solo local y nos dedicábamos netamente a la venta de llantas. Estamos en un sector de bastante crecimiento porque el transporte propio es algo muy apetecido, la gente aspira a tener su moto, auto, camioneta, así tengamos en Medellín el mejor transporte del país y uno de los mejores de Suramérica. Hay una oportunidad grande para crecer con servicio, hoy lo hacemos así, estamos haciendo cosas diferentes. Sabemos que el tiempo es básico en los clientes, ahora no te preguntan cuánto vale el servicio sino cuánto te demoras, dónde se pueden sentarse y conectarse a Internet, tomarse un café o una aromática… que, en esa hora o 40 minutos, que es lo que demora en promedio la prestación de un servicio, el cliente pueda sentirse cómodo, conectado a Wi-Fi, que de una u otra forma seamos también un co-working. Eso nos ha permitido hacer las cosas de manera diferente y hasta ahora hemos tenido éxito y buscamos agregarle cada vez más valor a nuestro servicio.”¿Y qué papel cumple el mantenimiento preventivo en la oferta de servicios?
“Definitivamente, el mantenimiento preventivo automotriz debe ser lo que marca en los consumidores, porque el correctivo vale mucho más. Estamos en el negocio de mantenimiento preventivo, lógicamente las llantas han tenido incrementos en su costo, y el mantenimiento preventivo es vital para nosotros por el número de entradas en el año. Un vehículo en promedio recorre 1.000 kilómetros mensuales, 12.000 al año, ahora que ha pasado un poco todo este tema de la pandemia pareciera que la gente aspira a tener más libertad, esto ha impactado muchísimo en los kilómetros de los vehículos y la gente que sale los fines de semana, que por teletrabajo y otros factores ya comienzan desde el mismo jueves o el viernes a mediodía, y en muchos casos, se extienden hasta el lunes a mediodía. Esto ha generado que la gente salga, haga más kilómetros y tengamos mayor labor en el mantenimiento preventivo, que es el que hacemos nosotros, este mantenimiento va en cambio de aceite, frenos y suspensión exprés, alineación y balanceo, lógicamente unas llantas duran entre 40 y 50.000 kilómetros, que en tiempo pueden ser unos cuatro años”.A propósito de la pandemia, ¿cómo les ha ido con este tema?
“Ahí destaco la sostenibilidad. Macrollantas ha sido siempre una empresa, desde su primer mes y año, sostenible y teniendo muy en cuenta el tema ambiental, lo económico y lo social. Lógicamente, la pandemia afectó en ese marzo-abril de 2020, no podemos desconocer que fue algo catastrófico cuando se presentó, de facturar el 20 % de lo que hacíamos anteriormente. Al siguiente abril-mayo ya facturábamos un poco más y, por fortuna, todo ha ido mejorando ostensiblemente, con un crecimiento casi del 25.-28 %”.¿Qué enseñanzas o lecciones le ha dejado esta situación?
“Nos ha enseñado bastantes cosas. Una de ellas, abrir los domingos, cambiamos el concepto que con la familia también se puede compartir durante la semana, trabajamos seis horas los domingos y se puede cambiar por un día completo la siguiente semana, tenemos varios turnos, estamos abriendo los domingos en las dos sedes principales, de 7:00 a.m. a 7:00 p.m. en tres turnos, acoplarnos a los horarios en los que trabaja la gente. La pandemia nos cogió un poquito organizados en el tema del e-commerce, en el virtual center, como lo llamamos nosotros, tenemos un centro virtual de negocios, está amparado por un call center, de innovación y desarrollo, de la página, de unos buscadores de placas, y de conocer inmediatamente la tipología del vehículo para poder empezar a trabajarle, como hacen los médicos con su historia clínica”.Para usted, ¿qué hace diferente a Macrollantas?
“La sostenibilidad, sin lugar a dudas. Somos una empresa sostenible al 130 %, el año pasado pudimos sacar casi 380 toneladas de desechos que finalmente iban para el relleno sanitario, esas toneladas tienen un valor que van para un fondo de empleados, que se va alimentando del ahorro de los empleados de todo el año y se duplica en la temporada de fin de año. Macrollantas es fundadora y participa en Sistema Verde, que es una planta de trituración de llantas para utilizar como combustible alternativo, ya son 100 mil toneladas de combustible alternativo que ha dado Sistema Verde al país, tenemos inversiones en reforestadoras, para que el medio ambiente continúe su marcha, si bien el planeta está muy maltratado, supuestamente no hay nada que hacer, pero hay que ser regenerativos, tenemos inversión en plantas trituradoras de llantas como combustible, en Cacerí, que es nuestra reforestadora, en la cual medimos, mitigamos y compensamos la huella de carbono, y de comprar bonos, mejor colocamos acciones en esta reforestadora”.Eso suena muy bien. ¿Y en el aspecto social?
“Lo diferente que hace Macrollantas es que intentamos ayudar mucho a los jóvenes, especialmente aquellos que se encuentran sin nada para hacer, tenemos algunos temporales, sabatinos, que ingresaron a trabajar en la parte de lavado de vehículos y hoy ya son técnicos, tecnólogos de primera clase, muy apetecidos en el mercado, yo digo que entraron y se matricularon en la universidad de Macrollantas. Si bien también llegan tecnólogos recién graduados del Sena, a veces llegan muy crudos, pero acá los afianzamos, un proceso de socialización. Tenemos un direccionamiento muy claro, que es orientar, exigir y motivar”.¿Qué metas o propósitos quieren alcanzar?
“Los sueños son diarios y se cumplen diariamente, cada vez que un colaborador nos trae un diploma de sus hijos, de su pareja o de ellos mismos, de núcleo familiar, son sueños cumplidos para nosotros, los mejores aguinaldos llegan desde noviembre con los diplomas de toda esta gente. Estamos con proyectos de abrir algunas sedes, rápidamente abriremos en Bogotá, donde existen unos compromisos con el Grupo Sura, al igual que en Cali y Pereira… ha sido una excelente tarea comercial la que hemos desarrollado, siempre con mucha responsabilidad”.