Por Fenalco Antioquia 2021 fue un año de contrastes, en el que se destacó el avance de la vacunación, la reactivación económica y la eliminación progresiva de las restricciones impuestas a raíz de la pandemia. También fue el año del descontento popular y la protesta social. Se espera que 2022 sea el del regreso a la normalidad. Sin embargo, hay pocas certezas y mucha incertidumbre, especialmente por las apariciones de nuevas cepas de Covid-19, la fluctuación de los precios internacionales y las elecciones presidenciales que podrían hacer que algunos inversionistas locales e internacionales aplacen sus proyectos hasta que se aclare el panorama político, económico y social.
Crecimiento económico
De acuerdo con el
DANE, al tercer trimestre de 2021 el PIB de Colombia durante los 12 meses precedentes fue de 884.270 miles de millones de pesos, lo cual implica un crecimiento anual de 6,6% con respecto al mismo trimestre de 2020. Si la economía crece en un 10% en el último trimestre del año, el crecimiento anual de 2021 será de 8,5%, el porcentaje más alto de las últimas décadas. No obstante, cabe resaltar que la recuperación del PIB es más estadística que real, pues después de la profunda caída de 2020, cualquier recuperación es percibida como elevada y así lo reitera el exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo: “La recuperación de la economía colombiana en 2021 fue buena, una de las mejores de Latinoamérica. Pero decir que es el crecimiento más alto en 115 años no tiene sentido, porque vino después del peor año de la historia. El crecimiento en relación con 2019 fue solo del 2,3%”. Estos resultados se explican en buena parte por la disminución de las medidas de confinamiento, el aumento del gasto de los hogares y del gobierno.
Consumo hogares
Al tercer trimestre del año, el consumo de los hogares de los últimos doce meses fue de 641,662 miles de millones de pesos y el del gobierno de 159,920 mil millones de pesos, montos superiores a los logrados al primer trimestre de 2020 cuando aún no había llegado la pandemia. Se trata de las cifras más altas en la historia económica de Colombia. Pero en materia de empleo, las cifras son mucho menos alentadoras, pues en noviembre de 2021 había un millón menos de personas ocupadas que en el mismo mes de 2019. Por lo tanto, el crecimiento no ha llegado a la mayoría de la población colombiana: la tasa de desempleo sigue siendo alta y los ingresos promedio no aumentan lo suficiente. Esto pone en peligro el ya frágil sistema de protección y seguridad social y perpetúa la precariedad del sistema laboral. La OECD pronostica que los niveles de empleo previos a la pandemia solo podrán alcanzarse a mediados de 2023.
¿Y en 2022? Lo más probable es que en 2022 el crecimiento del PIB sea inferior al de 2021, los pronósticos apuntan que el crecimiento del PIB oscilará entre el 3% y el 5%, teniendo en cuenta que es un año de inestabilidad e incertidumbre suscitado por las elecciones presidenciales y el aumento de la tasa de interés. Para el país es fundamental repensar el modelo de desarrollo que queremos promover en los próximos años. Necesitamos un Estado Social de Derecho que sea incluyente, que promueva la libre empresa, con democracia, moderno y deliberativo, donde el crecimiento y la recuperación económica lleguen a todas las personas.
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